En esta ponencia, desde la perspectiva de género, se expone parte de la compleja construcción en que se basa el estigma hacia el hombre que practica Ballet Clásico, enfocando el análisis en el cuerpo y sus representaciones.

En este caso, se aborda: el objeto/cuerpo desde el imaginario social y el objeto/material, a través de la semiosis en el análisis de los signos de apariencia estereotipados en el Ballet Clásico: el leotardo, el tutú, las puntas, las mallas, el suspensorio y el maquillaje.

Las manifestaciones dancísticas, al ser prácticas de lo corporal , se constituyen como fenómeno social con sus propias representaciones.

A partir de la afirmación de que el ser humano es concebido como la emanación de un medio social y cultural, determinado como una construcción cuyas claves no se encuentran únicamente en factores biológicos, sino como una forma moldeada por la interacción social; se debe considerar que la condición social no es un producto directo del cuerpo, por el contrario: la corporeidad es un efecto de la condición social.