Última modificación: 01-09-2014
Resumen
En el conocido debate entre Dreyfus y McDowell sobre la naturaleza de nuestro trato con el mundo, Dreyfus acusa a McDowell de caer en “el Mito de lo Mental”, el cual supone que, para que exista una relación normativa entre la mente y el mundo, tanto la percepción como la acción deben estar impregnadas por nuestras capacidades conceptuales. McDowell ha respondido a Dreyfus afirmando que sus acusaciones suponen una recaída en otro mito, el “Mito de la mente separada”, un mito con el cual él niega estar comprometido. Según este nuevo mito, tanto cuando la mente articula el contenido de la experiencia como cuando provee razones para actuar, se requiere que el sujeto esté o pueda estar en una relación contemplativa con el mundo. El objetivo de este trabajo será evaluar si la respuesta de McDowell a las objeciones de Dreyfus es satisfactoria; esto es, si las capacidades conceptuales son las que posibilitan a los agentes racionales hacer inteligible el contenido tanto de sus experiencias como de sus propias acciones.