Entre las manifestaciones de las violencias contra las mujeres, unas especialmente perjudiciales porque han sido naturalizadas a lo largo de los siglos e internalizadas por las mismas mujeres, son las que ejercen las iglesias cristianas, iglesias de índole claramente patriarcal. Estas violencias se plasman, entre otras, en la obediencia pasiva y la sumisión, el silenciamiento y el impedimento del ejercicio de la autoridad, cosas que perpetúan la desigualdad, la inequidad y la subordinación. Aún así, diversos movimientos de mujeres cristianas posibilitaron la toma de conciencia de esta situación, buscando nuevos modos de ser iglesia/s. En la ponencia realizaré una breve caracterización de dichos movimientos y los procesos que inspiraron. Me detendré luego en la presentación de una nueva forma de pensar y de reformular las creencias y las prácticas religiosas, la/s teología/s feminista/s, como uno de los ámbitos privilegiados en que se plasmaron esos movimientos, haciendo una memoria histórica de sus expresiones, como también de sus aportes a la disciplina teológica en sus distintas áreas. Por último, aplicando lo anterior a un tema particularmente significativo por sus implicancias, me referiré al modo en que la/s teología/s feminista/s critican la recepción de la figura de María en las iglesias.